Vivimos momentos de cambios vertiginosos a nivel global. En este contexto, el ámbito laboral ha debido enfrentar en el corto plazo ajustes importantes en la manera de entender y organizar el trabajo. Ello genera desafíos extraordinarios para los Líderes y directivos, no sólo en la manera de ejercer su rol en el escenario actual, debiendo transformarse en verdaderos catalizadores del cambio, sino también, y como elemento central de su efectividad, en la propia gestión de sí mismos como Líderes y principales movilizadores del propósito y la cultura organizacional.

Hoy ya no basta simplemente con jefaturas que indiquen qué es lo que se tiene que hacer, bajo el obsoleto enfoque de la gestión por instrucción (mandar/controlar) o el convencional modelo líder – seguidor. Ahora, más que nunca, se necesita contar con Líderes Reales que construyan un sentido de propósito y una cultura compartida, ejemplificando en su propio hacer aquellos valores y prácticas que declaran. Líderes emocionalmente resonantes, capaces de articular espacios psicológicamente seguros para liderar con sentido y al más alto nivel. Líderes Evolutivos que inspiren y movilicen un liderazgo transversal a lo largo de la organización, sustentados en el nuevo y evolucionado enfoque líder – líder.

Lo anterior requiere un cambio en la manera de aproximarse al fenómeno del Liderazgo. Dejando atrás la visión simplista de considerarlo solo un atributo individual o una mera competencia conductual (Hacer). Implica transitar a una perspectiva más sistémica y evolutiva, en la que el Liderazgo constituye un proceso organizacional de carácter estratégico y cultural, así como una expresión de la identidad y valores de los Líderes (Ser + Hacer = Resultados con Sentido). 

En respuesta a este desafío, y luego de más de 18 años de experiencias; aprendizajes y desarrollo empírico, nace el programa Liderazgo Estratégico Evolutivo LEEV® (Monsalves, J.